Novela
Anagrama
2020
192 páginas
Una novela desasosegante, íntimamente conectada con mi anterior reseña de Mamut y con Dogville de Lars Von Trier.
Una mujer se retira al campo por diversas inestabilidades en su vida, a una pequeña comunidad en la que de forma soterrada se muestra toda una gama de hostilidades y de formas de actuar que cohesionan esa sociedad, a pesar de la aparente virtud de cada personaje.
La forma de narrar es cruda y de una lógica aplastante en el pensamiento de la protagonista. ¿Quién no ha hecho cosas en su vida ante las que no tiene explicación ninguna? Bueno, puede que a veces, a posteriori, fabriquemos explicaciones que nos dejen satisfechos para no ahondar en esos aspectos que nos perturban dentro de nosotros mismos.
Nat, la protagonista, treintañera y traductora, recién llegada a esa pequeña sociedad rural, se engancha sexualmente a uno de los habitantes, alguien impasible e impávido y sin mayor atractivo. A partir de ahí todo transcurre a una velocidad vertiginosa, imposible de dejar de leer.
Me ha encantado la forma de narrar, la franqueza aparente de la protagonista que oculta muchas cosas entre toda la maraña de sensaciones y de pensamientos que nos ofrece. El resultado es una novela dura, de mucha soledad. También es la sensación de divergencia de los caminos emprendidos entre quienes viven en una ciudad en una comunidad grande y aséptica y quienes viven en el barro de una pequeña pedanía donde todo está comunicado.
Creo que es uno de los mejores libros que he leído en estos últimos tiempos.
